Os adjunto un e-mail que circula por la red en estos momentos:
Por la presente lamento comunicarles que he decidido pagar un 5% menos en el recibo mensual de la hipoteca que tengo con su banco. Ha sido una decisión difícil, pero me es imprescindible recortar gastos para salvar mi economía particular y reducir mi déficit. En situaciones como ésta es cuando todos debemos arrimar el hombro, por lo que les pido comprensión y solidaridad.
Al fin y al cabo, yo, como el resto de ciudadanos, colaboré en su día en la inyección de liquidez que recibieron ustedes para salvar el sistema financiero. En realidad me he visto forzado a tomar esta decisión porque mis padres, al ver el saldo de mi cuenta corriente, temen verse en la obligación de dejarme dinero y ustedes, como banqueros que son, saben mejor que nadie que no tiene sentido poner capital si no es para conseguir pingües beneficios.
Me he informado y sé que es lícito tomar este tipo de decisiones de forma unilateral y sin previa negociación (hay precedentes, ver declaraciones del presidente del Gobierno en el Parlamento el pasado 12 de mayo). Aprovecho la ocasión para comunicarles que ya dispongo de suficientes sartenes y no necesito que me regalen ninguna más. Atentamente, un funcionario hipotecado.
Al fin y al cabo, yo, como el resto de ciudadanos, colaboré en su día en la inyección de liquidez que recibieron ustedes para salvar el sistema financiero. En realidad me he visto forzado a tomar esta decisión porque mis padres, al ver el saldo de mi cuenta corriente, temen verse en la obligación de dejarme dinero y ustedes, como banqueros que son, saben mejor que nadie que no tiene sentido poner capital si no es para conseguir pingües beneficios.
Me he informado y sé que es lícito tomar este tipo de decisiones de forma unilateral y sin previa negociación (hay precedentes, ver declaraciones del presidente del Gobierno en el Parlamento el pasado 12 de mayo). Aprovecho la ocasión para comunicarles que ya dispongo de suficientes sartenes y no necesito que me regalen ninguna más. Atentamente, un funcionario hipotecado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario